La colocación del concreto bajo temperaturas extremas ya sean bajas o altas temperaturas, se ve influida en cuanto a que puede perjudicar la calidad del concreto fresco y consecuentemente cuando esté endurecido.
En el caso de temperaturas altas el fraguado puede presentarse de una forma rápida y hay probabilidad de que se produzcan grietas, lo que también repercute en el control de contenido de aire.
Concreto en clima caluroso.
Los problemas del clima cálido se encuentran más frecuentemente en el verano, pero los factores climáticos asociados de fuertes vientos, baja humedad relativa y radiación solar pueden ocurrir en cualquier momento, especialmente en climas áridos o tropicales. Las condiciones del clima cálido pueden producir una alta tasa de evaporación de la humedad en la superficie del concreto y un tiempo de manejabilidad corto, entre otros problemas. Generalmente una alta humedad relativa tiende a reducir los efectos de una elevada temperatura.
Las altas temperaturas por si solas causan incrementos de la demanda de agua, los cuales a su vez elevarán la relación agua/cemento resultando en una más baja resistencia potencial. Las temperaturas más altas tienden a acelerar la pérdida de asentamiento (revenimiento) y pueden provocar pérdida del aire incorporado. La temperatura también tiene un gran efecto sobre el tiempo de manejabilidad del concreto: el concreto colocado bajo altas temperaturas fraguará más rápido y puede por lo tanto requerir un acabado más pronto. El concreto que es curado a altas temperaturas a edad temprana, no será tan resistente a los 28 días como el mismo concreto curado a temperaturas en el rango de los 20°C.
Las altas temperaturas, una alta velocidad del viento y una baja humedad relativa, pueden afectar al concreto fresco de dos formas importantes: El elevado ritmo de evaporación puede inducir a una temprana fisuración por retracción plástica o por retracción por secado, y el ritmo de evaporación puede también eliminar el agua de la superficie necesaria para la hidratación, a menos que se empleen métodos apropiados de curado. El agrietamiento térmico puede producirse por una rápida caída en la temperatura del concreto, tal es el caso de las losas o paredes de concreto que son vaciados en un día cálido, seguido de una noche fría. Una alta temperatura acelera también la hidratación del cemento y contribuye a un potencial agrietamiento térmico en estructuras masivas de concreto.
Las precauciones y recomendaciones que pueden adoptarse, caso sea necesario continuar con la colocación de concreto bajo estas condiciones son:
- Empleo de agua fría para el mezclado (si es posible adicionar hielo).
- Empleo de aditivos reductores de agua y aditivos retardantes.
- Uso de cemento IP – Multipropósito Yura de bajo calor de hidratación conforme con ASTM.
- Coberturas móviles: indicados en obras de trazo lineal para protegerlo del sol y del viento con el fin de conservar su propia humedad.
- Láminas de plástico: pueden colocarse directamente sobre el concreto a fin de prevenir la evaporación.
- Películas de curado: A base de resinas que se pulverizan sobre la superficie del concreto y forman al polimerizarse una película protectora que impide la evaporización del agua.
- Tener una adecuada mano de obra lista para el colado (vaciado), darle acabado y curado del concreto.
- En días secos y/o cálidos, cuando las condiciones sean propicias para un agrietamiento por retracción plástica, humedezca la base, encofrados, y el refuerzo, cuidando de no agregar demasiada agua para alterar el diseño de mezcla.
Autor: Ing. David Umiri Flores